El arroz se ha convertido a lo largo de los milenios en uno de los pilares básicos de cualquier gastronomía a lo largo de los cinco continentes del planeta. De hecho, es el segundo cereal más consumido superado únicamente por el maíz.
Esto se debe a que es un alimento con un aporte calórico considerable mientras que al mismo tiempo su cultivo, procesamiento y elaboración apenas resulta costoso de realizar. Japón es indudablemente el lugar donde más se consume arroz y así lo demuestran los más de 90 millones de toneladas producidas en tan solo un año.
¿Pero cuáles son los beneficios reales del arroz? Seguro que muchos os preguntaréis. Pues vayamos por partes. En primer lugar, se trata de un cereal que está libre de colesterol malo debido ya que no tiene grasas insaturadas y por tanto resulta de lo más beneficioso para todas aquellas personas que tienen el colesterol alto o sufren de hipertensión.
Por su parte, el arroz es también muy rico en vitamina C junto a otros minerales como el hierro, la tiamina o la riboflavina que en su conjunto fortalecen todo nuestro sistema inmunológico y favorecen un correcto metabolismo de todos los nutrientes que ingerimos. Por último, también cabe destacar que el arroz es beneficioso para nuestra piel debido a sus compuestos fenólicos e incluso previene otras enfermedades como el Alzheimer.
El arroz debe formar parte de una dieta sana y equilibrada
Seguro que tras leer esto, habéis caído en la cuenta en la importancia que tiene consumir arroz para así conseguir una dieta de lo más sana y equilibrada. De hecho, con el paso de los años se ha convertido también en uno de los pilares básicos de la dieta mediterránea, sobre todo si se toma completamente hervido y sin ningún tipo de salsa.
Todo ello sin decir que este cereal también se puede convertir en un potente aliado para cuidar nuestra línea y decirle adiós a esos kilos de más. Sobre todo si lo tomamos de forma integral donde su alto contenido en fibra nos ayudará también a reducir los niveles de colesterol y a esos molestos cálculos intestinales en forma de diarreas o estreñimiento.
Si a todo esto le acompañaos de una gran cantidad de verduras, un consumo moderado de carnes y pescados junto a un poco de ejercicio diario y constante, podéis estar seguros que vuestra salud os estará eternamente agradecida.
¿Cómo podemos conseguir el arroz en su punto? Según el tipo de arroz
Sin embargo, son muchas las personas que se encuentran bastante perdidas a la hora de cocinar el arroz. En muchas ocasiones se les pasa, pervirtiendo así su sabor y parte de sus propiedades más importantes. ¿Es este vuestro caso?.
Pues no os preocupéis porque a través de las siguientes líneas os vamos a dar una serie de consejos que os van a ser de gran utilidad y que van a estar divididos según el tipo de arroz que vayáis a consumir:
- Arroz largo. Es sin lugar a dudas uno de los más extendidos. Se recomienda que se debe cocer con el doble de agua. Así que si vamos a cocinar una taza de arroz, deberemos añadir dos de agua. El tiempo de cocción no debe ser superior a 12 minutos.
- Arroz redondo. Se recomienda antes que nada sofreír un poco el arroz antes de cocerlo. Una vez hecho esto, se deben añadir dos tazas y media de agua por cada una de arroz. El tiempo de cocción deberá ser de 15 minutos.
- Arroz integral. Como ya hemos comentando en el anterior artículo, este tipo de arroz es una de las opciones más saludables. Aunque sí que resulta algo más complejo de preparar. Necesitaréis cuatro tazas de agua por una de arroz para después cocer todo durante unos 40 minutos.
- Arroz basmati. Otro de los pilares básicos de la gastronomía asiática. Su preparación será igual que el arroz largo y por tanto necesitaréis dos tazas de agua por cada una de arroz. Y su proceso de cocción no deberá superar los 12 minutos.
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